jueves, septiembre 01, 2011

La Crisis Económica Mundial Contemporánea: Un reto Cristiano

Luis Fernando Ortiz

La Crisis Económica-Mundial reciente, fue un suceso que muy pocos habían predicho y algunos otros ni la imaginaron. De hecho en una visita que la Reina de Inglaterra hizo a la London School of Economics, “Su Majestad“ realizó una serie de cuestionamientos a los conferencistas sobre el por qué ninguno de ellos había podido siquiera prever este evento, en ninguna forma1. Caso similar con la calificadora Stándard & Poor´s que dio una calificación buena a títulos chatarra poco antes de que estallara la burbuja financiera en 2008.

Hoy estamos a tres años del surgimiento de lo que se ha calificado como “La gran Recesión” —haciendo alusión, por su impacto, a la crisis económica de 1929 y que se conoció como “La gran Depresión”—, y a pesar de que mucho se habló de una recuperación, la realidad es totalmente contraria: Los países europeos hoy se enfrentan a una posible disolución del Euro2, a rescates financieros y también a movimientos sociales que quieren, piden y se encuentran luchando porque no se recorte el gasto en programas de interés social (Educación, Salud, Vivienda etc.). Esto último es característico de la mayoría de países en el mundo donde la discusión sigue siendo en mantener las finanzas Estatales sanas —Como Estados Unidos hace algunas semanas. La salida al déficit aprobada y además aplicada en los distintos gobiernos del mundo ha sido recortar el gasto del sector público, en vez de aumentar los impuestos a los ricos como ha propuesto el multimillonario Warren Buffet3.

Debemos entender que el mundo ha entrado en Crisis, después de haber transitado por una visión social, económica y política llamada Neoliberalismo en la mayoría de países desde hace aproximadamente tres décadas y, sería mostrar solo una parte de lo que realmente sucede, si decimos —como la mayoría lo hace— que sólo es la Crisis financiera, respuesta que se apoya en esta visión.

Hoy, el mundo se encuentra debatiendo entre dejar las fuerzas del mercado (visión neoliberal) actuar libremente o, realizar una mayor participación Estatal (visión keynesiana)4 dentro de la Economía. Podemos fácilmente notar quien va ganando la batalla. En la aplicación de políticas económicas en el globo, la derecha neoliberal se encuentra imponiendo su forma de ver el mundo. El plan fiscal aprobado en Estados Unidos, así como los diferentes planes de rescate en Europa y las privatizaciones por ejemplo, en Chile, son expresiones de esa imposición.

Pero como mencioné, es una Crisis, es decir, no tiene el apellido sólo de, “económica” sino también, “energética”, “alimentaria” pero más importante es una “Crisis sistémica”. Se debe comprender que es una Crisis Global, en otras palabras, que implica la totalidad de la vida humana, como dijo el economista español José Luis Sampedro: “La crisis, no es la crisis financiera, es la crisis del sistema”. Pero, ¿De qué sistema se está hablando? No podemos negar que se trata del sistema “capitalista” que ha abrazado al neoliberalismo como su cubierta ideológica5,

Este sistema basado en el mercado y los precios como eficientes asignadores de recursos, hoy, se encuentra en crisis de nuevo6. No es —como mencione— el pensamiento solamente Neoliberal, es la totalidad del sistema que encontró un tope a las ganancias, a su reproducción misma.

Lo que quiero manifestar, es que la Crisis es sistémica y para algunos pensadores hasta de Civilización. En otras palabras, no se puede ya seguir manteniendo nuestra forma de vida. ¿Por qué? Porque los recursos ya no lo permiten, porque la contaminación ya ha llegado a modificar el clima y por último porque la crisis alimentaria hoy es ya ineludible.

Estos topes se encuentran en la base de la reproducción de nuestra vida, pero son anulados por la visión de una crisis financiera, haciéndonos pensar que la culpabilidad es exclusivamente de los bancos y bolsas del mundo, pero no a la forma de nuestra sociedad que ya no puede garantizar la vida humana a todos, a cristianos y ateos, a ricos y pobres.

Es así, que los gobiernos se encuentran enfrascados en rescatar no a los bancos sino a este sistema, y también hay la incapacidad de los organismos internacionales (FMI, BM y OMC) para intervenir de forma real y oportuna en la economía. A pesar de todos los esfuerzos la economía por el momento se encuentra cayendo Eso es lo que ocurre en la Economía-Mundial actualmente.

Ahora disculpe el lector la brevedad y la superficialidad con que trato el asunto, hacerlo nos llevaría a un análisis más largo —aunque más rico en sustancia—, me dirigiré a un punto que tal vez no se ha pensado desde un punto de vista cristiano, y es este: ¿Cómo respondemos ante esto como cristianos? ¿A quién apoyamos? ¿Es el sistema capitalista compatible con el cristianismo? Y como pregunta más concreta que resulta de la respuesta de la anterior ¿Qué debemos hacer en caso contrario?

Para empezar, existe una incapacidad para responder a dichas preguntas, en primer lugar porque para nosotros, la mayoría de lo que está sucediendo no es relevante y lo pensamos como algo fuera del terreno bíblico, y por lo tanto ajeno a lo que nos interesa. De esta forma limitamos nuestro campo de acción. Hay cursos y seminarios cristianos sobre matrimonio, juventud y familia (todos ellos vistos desde los valores estadounidenses) y nos limitamos a realizar y avanzar en un cambio en esos aspectos. Pero poco nos preocupamos por el pobre y la verdadera causa de su pobreza.

Esto da como consecuencia que tengamos nuestra propia cultura, nuestro “mundo” apartado. Tenemos cantantes, oradores y escritores profesionales. Estos hombres poco entienden de la dinámica mundial pero en cambio tienen una gran influencia en los cristianos. Existen problemas serios, no en África o Asia, sino en nuestros países latinoamericanos. Existen esos problemas pero no políticos, científicos o profesionistas cristianos que entiendan lo que realmente sucede y propongan una forma de proceder.

En segundo lugar se nos hace incapaz responder, porque creemos que cualquier pensamiento que se muestre inconforme a lo político o económico, tendría necesariamente una violación a lo que Pablo dijo: “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas” Romanos 13:1.  De ésta forma la única manera de proceder es aceptar lo ya establecido sin decir nada.

Quiero terminar concluyendo que es muy necesario revalorar nuestra forma de vivir el cristianismo existente en nuestros países, porque es innegable la influencia que tenemos de Norteamérica. Es un cristianismo que no se cuestiona lo que existe, lo que sucede, que encuentra todo como muy normal y eterno, aun cuando se encuentre muy dispar y efímero.

No pienso en un Cristianismo revolucionario a la Che Guevara, pero, per se el Cristianismo es revolucionario, es decir, no se acomoda a los estándares de la vida normal, a los patrones de existencia de un país o de un sistema económico, sino a los estándares de Dios, de compasión y renovación.

Debemos hablar y estar inconformes con lo que sucede.

Abre tu boca por el mudo…Proverbios 31:8

Bibliografía
  • AMIN, Samir, et. al., Crisis Económica, financiera, sistémica, Maia, Madrid, 2010.
__________
  1. NADAL, Alejandro. “Carta a la reina de Inglaterra”. Publicado en La Jornada, México, 26 de agosto de 2009.
  2. WHITNEY, Mike. “Es hora de sacrificar al euro para que no siga sufriendo”, en  <http://www.rebelion.org/noticia.php?id=133845&titular=es-hora-de-sacrificar-al-euro-para-que-no-siga-sufriendo> (vi: 13 de agosto de 2011).
  3. BROOKS, David. “Dejen de consentir a los ricos, dice Buffet a políticos de EU”, en La Jornada, 16 de agosto del 2011, México, <http://www.jornada.unam.mx/2011/08/16/economia/024n1eco?partner=rss>(vi: 16 de agosto de 2011).
  4. Para aquellos que no conocen nada de teoría económica, el Keynesianismo fue la respuesta académica a la crisis de 1929. En esos años los economistas neoclásicos, confiaban que el sistema de mercado (capitalismo) se autorregularía y volvería a la normalidad. Sin embargo, esto no sucedió y se hizo necesario que el Estado interviniera para rescatar a la economía. Keynes observo y concluyó que era necesario regular al capitalismo pues es inestable.
  5. Para este punto, recordemos que en los años 1950-1970, el keynesianismo cumplió el mismo objetivo que el neoliberalismo hoy, es decir, funcionó como arma ideológica para el capitalismo. En sí, podemos decir que keynesianismo o neoliberalismo son sinónimos de capitalismo, uno más regulado, el otro dejado libremente.
  6. La forma de capitalismo apoyada en el Keynesianismo, entro en crisis en 1970-71, en ese momento el neoliberalismo toma la batuta para sustentar la reproducción del sistema.